El fotógrafo británico James Reynolds, al tener la curiosidad de lo que los presos condenados a muerte pedían para comer en la última noche de su vida, decidió hacer la serie de fotografías titulada: Last Suppers, donde muestra las charolas que contienen lo que los reclusos pidieron como su última cena.
Las fotografías se componen de la charola naranja, el contenido pedido en ellas, y un pie de foto donde viene el nombre del preso, su delito y fecha de ejecución. El artista tuvo contacto directo con los psicólogos de los reclusos para seguir de cerca todo el procedimiento de su muerte.
Fuente:
http://www.culturacolectiva.com/La-ultima-charola
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